Curiosa la forma que tiene Google Drive de tratar de que instalemos la aplicación de escritorio.
Estaba copiando el contenido de 3 celdas de una hoja de cálculo de Google Docs cuando me apareció esto:
Demasiado forzado…
Information technologies. Per aspera ad astra
Antonio Ortiz escribe, tras el reciente cierre de Google Reader, un post indicando que el modelo Google Reader era imposible (y lo seguirá siendo).
Obviamente el mercado de los lectores RSS es mucho menor que otros de servicios gratuitos como Gmail, Google Maps, Google Play, Google Maps,… y puede que sea un volumen que no le interese a Google; pero de ahí a decir que el modelo de negocio de un lector RSS online es imposible creo que hay un gran paso.
Google, si hubiera considerado interesante el volumen o el segmento de usuarios, podría haber monetizado el servicio a través de varios métodos:
Versión de pago, como hacen con Google Apps, que pasó por una versión previa freemium.
Por lo tanto creo que hay que buscar las razones en otros lugares, no en que el producto no sea viable económicamente; simplemente puede que su beneficio no le interese a un gigante como Google.